Como lo hacen solamente las
grandes bandas, en un momento complicado del rock nacional, Bersuit Vergarabat
dio un show de un gran calibre que dejo mas que conformes a las 7000 personas
que le hicieron frente a una entrada que tenía precio europeo.
Alrededor de las 21 horas nos
hicimos presente en el estadio de la calle Corrientes y Bouchard, en ese
momento la banda italiana Negrita estaba en el medio de su show. El mismo, a
fuerza de guitarras y con un despliegue en escena muy importante de la banda,
se gano los aplausos del público. Al que le interese un poco mas la propuesta
este jueves “Negrita” se estarán presentando en Niceto Club.
A las 21.50 se apagaron las luces y
la puesta de varias sillas en el escenario hacia intuir que algo distinto se
avecinaba en la luna llena de Bersuit. Así fue que todos los músicos se
ubicaron en cada una de las que estaban dispuestas sobre el escenario, las
cuales estaban ubicadas en forma de “U”.
Arrancaron con una intro que desconcertó
a varios pero el primer tema finalmente fue “Mi Caramelo”, el cual hizo poner
al todo al estadio de pie. Siguieron con los temas acústicos y ya con una luna
gigante de fondo, mostrando la temática del show: “Bersuit en Luna llena”.
“Madre hay una sola” y “La
Soledad”, con unos arreglos increíbles que enriquecieron al
tema superando por momentos a la versión original, fueron los dos que
siguieron.
“Luna hermosa”, del último disco
editado en el 2008, aplacó un poco los ánimos. La sorpresa, para alegría de
muchos entre los cuales se incluye el cronista, fue “Al fondo de la red” en una
versión increíble que ratificó la necesidad de que la banda de Cordera saque
del arcon ese gran disco que es “Don Leopardo”. “Perro amor explota” generó el
primer pogo en el campo, con una versión acústica aunque no lo crean. El último
de este set fue “El viento trae una copla”, un tema que siempre emociona y que
recuerda el exilio de los jóvenes en la época menemista. Fue una hora de un set
acústico, que esperemos que se repita muchas veces más.
El Pelado Cordera avisó que en un
ratito volvían y así fue como se rearmo una nueva puesta en escena, muy linda
por cierto, que mostraba dibujos del arte precolombino en una pantalla dividida
en varias partes. El primero del set eléctrico fue “Laten bolas”, al cual le
siguió “Mi vida”, dos que están presentes en el ultimo disco de Bersuit
Vergarabat.
“A los tambores” nos retrotrajo a la
época de “Libertinaje”, también pasó “El gordo motoneta”, otro de los que
fueron desempolvados. A esta altura el campo era una fiesta y el calor acechaba
en todos los sectores del estadio.
Párrafo aparte merece “El guerrero”,
en una versión potente que, a mi entender, es mas interesante que la del disco.
La banda muestra otra faceta, en la cual se adapta perfectamente a los nuevos
sonidos y con un “Pepe Céspedes” impecable en las cuatro cuerdas.
A esto le siguió el “segmento
tropical” que arranco con “En la ribera” donde Cordera hizo mención a los orígenes
de la banda. La ametralladora de cumbias estuvo compuesta por: “Va por la Chapultepec”, “El
baile de la gambeta”, “Yo tomo” y “El viejo de arriba”. Este medley dejo a la
gente exhausta que se bailó todo en los pasillos de las distintas tribunas.
Cuando parecía que la banda iba a
bajar un poco los decibeles, Gustavo Cordera anunció que se venia una samba, sin
embargo apareció “La petisita culona”, otro de los que salieron del freezer. El
tema fue opacado por las jóvenes que subieron a bailar, ya que no permitieron
que los músicos se desplazaran con normalidad sobre el escenario y solo
buscaban esta lo más cerca posible de la banda para llenar de besos a los
músicos, esto hizo recordar a un recital de “Enrique Iglesias” en vez a uno de
rock.
Dani Suárez tomo su guitarra acústica
y se hizo cargo de “Esperando el impacto”, tema del disco “Testosterona”. Luego
fue el turno de “Albertito Varenzuela”, que fue ovacionado durante todo el show
por la gente, para entonar la gran pieza que es “Porteño de Ley”, en donde se
cuenta la historia de un porteño que todos alguna vez nos hemos cruzado en
nuestra vida.
“Se viene” puso a la gente en el éxtasis total,
logrando que nadie se quede sentado y todos agiten la remera por sobre las
cabezas. Con este tema Bersuit se retiro del escenario pero la gente sabia que
quedaba un restito.
Los dos últimos fueron “Murguita del
sur” y “Un pacto”, entonada casi en su totalidad por el público. Sobre el
final, Bersuit se despidió con un: “Nos veremos en algún momento, en algún
lugar”. De esta manera genero una incógnita sobre el futuro de otra de las
grandes bandas de los `90.
Bersuit Vergarabat demostró estar
intacta después de 21 años en la ruta, toda la propuesta del show fue mas que
valida y dejo satisfecha a toda la gente que se acerco al Luna Park en las
lunas llenas de Abril y Mayo. Desde este lugar deseamos que se repitan estos
shows, pero con una entrada más económica ya que dio bronca ver butacas vacías.
Durante el próximo fin de semana Bersuit se presentara en Córdoba y San Luis,
luego de estos seguramente entraran en un impasse de shows.