La Condena de Caín festejó sus 10 años en Niceto Club el último jueves
de octubre, pero la noticia es que la fiesta llega en el mejor momento de su
carrera. La noche tuvo todos los condimentos que un cumpleaños necesita,
emoción, canciones y una banda que tiene el rock brotándole por los poros.
Es ser mezquino centrarse solo en
el festejo de cumpleaños de La Condena, porque fue una noche que tiene mucho
más para desmenuzar y analizar. Cualquier hombre recuerda cuando pega el famoso
“estirón”,o cuando se hace “mujercita”, en el caso de las mujeres, con las
bandas pasa lo mismo, hay algún disco, show o momento de la carrera que los
hace crecer en todos los aspectos. Este es el caso de Sawa Mielnik y sus
muchachos, llevan más de 1 año de crecimiento constante.

Las expresiones artísticas de
distinta índole aparecieron a la largo de la noche con dos pintores en el
escenario, dándole una escenografía más que interesante al concierto. La
Condena de Caín sigue demostrando que la música es una parte del combo que
ofrecen cada vez que tocan. La Fernández Fierro estuvo presente para sumar en
dos canciones, “La fuga” fue una de ellas, y quizás el pico más alto de la
noche.
“Tan free shop”, “El oro y el
pólvora” entre otras sonaron a la perfección mostrando un laburo en el
laboratorio, ya que es muy complicado llevar canciones que tienen distintas producciones a un repertorio
compacto y sin fisuras como el que se presentó en la noche del jueves.

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