Como es costumbre desde aquella noche en el Estadio Obras, Cultura Profética, la banda de reggae más importante de habla hispana, visitó Argentina para una semana cuasi completa de shows, el primero tuvo lugar en el Microestadio Malvinas Argentinas ante un lleno total, en un lugar que ya los había visto brillar en agosto del año pasado.
No había disco para
presentar, el último de estudio editado fue “La Dulzura” del año
2010, igualmente cada show de esta banda puertorriqueña genera una
intriga, porque es casi imposible escuchar versiones similares de los
temas en cada una de las visitas que realizan a nuestro país, y vaya
que nos sorprendieron en esta ocasión: reversiones, tema nuevo y
algunos que sonaron muy poco en vivo a lo largo de su historia que ya
tiene más de 17 años.
La noche era especial,
había que hacerle frente a una tormenta y acercarse al estadio
ubicado en la calle Gutemberg, al cual siempre cuesta llegar, para
vivir una noche de reggae de excelente calidad. Una intro le dió
paso a “La Complicidad” y “Un deseo”, sorpresivamente
abrieron con dos clásicos y comenzaron a seducirnos y a llevarnos de
las narices por esas melodías tan “ricas” que tiene la banda
liderada por Willy Rodríguez.
Pasaron varios temas
para el primer saludo desde el escenario, siempre es impactante ver
las caras de los músicos de Cultura cuando se encuentran con el
público argentino, nunca terminan de sorprenderse ante tanto cariño.
“Soldado”, uno de esos viejitos del disco “Ideas nuevas”, que
sorprendió a muchos, pero no iba ser el único, ya que en la segunda
mitad del show apareció “Desde mi silla”, uno de “M.O.T.A.”,
que casi nunca había sonado en vivo.
La trilogía de “Dias
intensos”, “Árboles” y “Sube el humo” fue uno de los
puntos altos de la noche, los climas generados desde los teclados,
sumados a la calidad de los vientos dan como resultado momentos en
donde la música se adueña de los asistentes y los hace pasear por
todos los sonidos de nuestro continente.
En cada visita, ellos
aprovechan para comentar la situación actual de Puerto Rico y todo
el trasfondo político que tiene la isla en su lucha por la
independencia total de Estados Unidos. Los viajes por toda América
llevan a la banda a mostrarse como una bandera de resistencia fuerte
dentro de la isla centroamericana. “Amante luz” es una canción
con un claro mensaje, el cual Cultura Profética siempre trata de
hacer llegar con su música.
Luego de dos horas se
fueron del escenario, pero 5 minutos más tarde volvieron con los
bises, que duraron 1 hora, pasaron “La Espera”, “Rimas para
seducir”, entre otros. El clima estaba para que sigan tocando, y
ellos no hicieron caso omiso a eso, se coló la versión de “Ideas
nuevas” presentada en el show del Luna Park. Quedaba poquito, el
agite final con “Mr Swin y los tres pasitos jazz ensemble” hace
mover a un público que necesita el pogo como el agua, Willy desde el
escenario hasta pidió disculpas por eso y acusó a “los hongos”
que iban a buscar a la selva cuando eran jóvenes por dejarlos en
“cámara lenta” en muchos momentos de sus shows.
El final con el clásico
“Es un sentimiento, no puedo parar....” de parte del público es
el cierre perfecto para otra banda que hicimos propia y que tiene una
debilidad por Argentina. Hay que tener en cuenta que Cultura
Profética en sus shows grandes en su tierra convoca 2000 personas, y
acá a muchos km de su casa junta casi 15 mil en 6 shows. Este es un
tema que aprendieron a manejar y que a través de su sonido harán
crecer visita a visita.
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